La Rotura de Puente Térmico, es producto de una elaborada tecnología que culmina en la unión de un aislante como la poliamida, con el mejor material creado para hacer una ventana, el aluminio. Con la fusión de ambos materiales, se logra aunar lo mejor de las propiedades de ambos y conseguir así un aislamiento térmico y acústico único en el mercado del cerramiento.